LECTURAS DEL LUNES IX DEL T. ORDINARIO 1 DE JUNIO MEMORIA DE SANTA MARÍA MADRE DE DIOS SE REANUDA EL TIEMPO ORDINARIO SEMANA IX (BLANCO)


Éste es el heredero; vamos a matarlo y la herencia será nuestra.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN JUSTINO MÁRTIR



ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Hech 1. 14


Los discípulos perseveraban unánimes en la oración junto con María, la Madre de Jesús.


ORACIÓN COLECTA


Dios, Padre de misericordia, cuyo Unigénito, clavado en la cruz, proclamó como Madre nuestra a su propia Madre, María santísima, concédenos, por su cooperación amorosa, que tu Iglesia, siendo cada día más fecunda, se alegre por la santidad de sus hijos y atraiga a su seno a todas las familias de los pueblos. Por nuestro Señor Jesucristo …


LITURGIA DE LA PALABRA


Dios nos ha concedido los maravillosos bienes prometidos, que nos hacen partícipes de la naturaleza divina.


De la segunda carta del apóstol san Pedro: 1, 1-7


Yo, Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, les escribo a ustedes, los que han obtenido una fe tan preciosa como la nuestra, gracias a la justicia de Jesucristo, nuestro Dios y Salvador. Que abunden entre ustedes la gracia y la paz, por el conocimiento de Jesucristo, nuestro Señor.


Su acción divina nos ha otorgado todo lo necesario para llevar una vida de santidad, mediante el conocimiento profundo del que nos ha llamado con su propia gloria y poder. Por medio de las cuales nos han sido otorgados también los grandes y maravillosos bienes prometidos, para que por ellos puedan ustedes escapar de la corrupción que las pasiones desordenadas provocan en el mundo, y lleguen a participar de la naturaleza divina. Por eso, esfuércense en añadir a su buena fe, conducta; a la buena conducta, la inteligencia; a la inteligencia, el dominio propio; al dominio propio, la perseverancia; a la perseverancia, la piedad; a la piedad, el amor fraterno, y al amor fraterno, la caridad.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Del salmo 90



R/. Tú eres mi Dios y en ti confío.


Tú, que vives al amparo del Altísimo y descansas a la sombra del Todopoderoso, dile al Señor: "Tú eres mi refugio y fortaleza; tú eres mi Dios y en ti confío". R/.


"Puesto que tú me conoces y me amas, dice el Señor, yo te libraré y te pondré a salvo. Cuando tú me invoques, yo te escucharé yen tus angustias estaré contigo". R/.


"A quien se acoge a mí, dice el Señor, yo lo defenderé y colmaré de honores; lo haré disfrutar de larga vida y haré que pueda ver mi salvación". R/.


ACLAMACIÓN   Cfr. Ap 1, 5









R/. Aleluya, aleluya.



Señor Jesús, testigo fiel, primogénito de entre los muertos, tu amor por nosotros es tan grande, que has lavado nuestras culpas con tu sangre. R/.


Se apoderaron del hijo, lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña.


Del santo Evangelio según san Marcos: 12, 1-12


En aquel tiempo, Jesús comenzó a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos y les dijo: "Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó una torre para el vigilante, se la alquiló a unos viñadores y se fue de viaje al extranjero.


A su tiempo, les envió a los viñadores un criado para recoger su parte del fruto de la viña. Ellos se apoderaron de él, lo golpearon y lo devolvieron sin nada. Les envió otro criado, pero ellos lo descalabraron y lo insultaron. Volvió a enviarles otro y lo mataron. Les envió otros muchos y los golpearon o los mataron.



Ya sólo le quedaba por enviar a uno, su hijo querido, y finalmente también se lo envió, pensando: ‘A mi hijo sí lo respetarán’. Pero al verlo llegar, aquellos viñadores se dijeron: ‘Éste es el heredero; vamos a matarlo y la herencia será nuestra’. Se apoderaron de él, lo mataron y arrojaron su cuerpo fuera de la viña. ¿Qué hará entonces el dueño de la viña? Vendrá y acabará con esos viñadores y dará la viña a otros. ¿Acaso no han leído en las Escrituras: La piedra que desecharon los constructores es ahora la piedra angular. Esto es obra de la mano del Señor, es un milagro patente?"


Entonces los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos, quisieron apoderarse de Jesús, porque se dieron cuenta de que por ellos había dicho aquella parábola, pero le tuvieron miedo a la multitud, dejaron a Jesús y se fueron de ahí.


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Recibe, Señor, nuestras ofrendas y conviértelas en sacramento de salvación, por cuya eficacia y por la intervención amorosa de la santísima Virgen María, Madre de la Iglesia, nos llenemos de santo fervor y merezcamos quedar más íntimamente asociados, con ella, a la obra de la redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO


María, modelo y Madre de la Iglesia.


En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno, y alabarte en esta conmemoración de la Virgen María. Porque ella, al aceptar tu Palabra en su corazón inmaculado, mereció concebida en su seno virginal y, al dar a luz a su Creador, preparó el nacimiento de la Iglesia. Porque ella, al aceptar junto a la cruz el encargo de tu amor, recibió como hijos a todos los hombres, redimidos por la sangre de Cristo. Porque ella, al unirse a las oraciones de los Apóstoles y de los discípulos. que esperaban la venida del Espíritu Santo prometido, se convirtió en el modelo de la Iglesia suplicante. Y, desde su asunción gloriosa al cielo, sigue mostrando su amor a la Iglesia peregrina, y protege sus pasos hacia la patria del cielo, hasta que venga el Señor, lleno de gloria. Por eso, con todos los ángeles y santos, te alabamos sin cesar, diciendo: Santo, Santo, Santo …


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN


Hubo unas bodas en Caná de Galilea a las que asistió María, la Madre de Jesús. En esa ocasión, Jesús dio principio a sus milagros, manifestó su poder y sus discípulos creyeron en él.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Habiendo recibido esta prenda de redención y vida, te suplicamos, Señor, que tu Iglesia, por la ayuda maternal de la santísima Virgen, instruya a todas las naciones, anunciándoles el Evangelio, y llene al mundo entero con la efusión de tu Espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 31 mayo, 2020 at 15:11  Comments (2)  

LECTURAS DEL DOMINGO DE LA SOLEMNIDAD DE PENTECOSTÉS 31 DE MAYO (ROJO)


El Espíritu Santo que mi Padre les enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les recordará toda cuanto yo les he dicho.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


VISITACIÓN DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA


Misa de la Vigilia


La Misa de la Vigilia de Pentecostés se dice en la tarde del sábado, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de la solemnidad.


ANTÍFONA DE ENTRADA Rm 5, 5; Cfr. 8, 11


El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros. Aleluya.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA


Concede, Dios todopoderoso, que resplandezca sobre nosotros el fulgor de tu gloria, y tú, luz de luz, mediante la iluminación del Espíritu Santo, reafirma los corazones de quienes, por tu gracia, renacieron a una vida nueva. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Derramaré mi espíritu sobre mis siervos y siervas.


Del libro del profeta Joel: 3, 1-5


Esto dice el Señor Dios: "Derramaré mi espíritu sobre todos; profetizarán sus hijos y sus hijas, sus ancianos soñarán sueños y sus jóvenes verán visiones. También sobre mis siervos y mis siervas derramaré mi espíritu en aquellos días. Haré prodigios en el cielo y en la tierra: sangre, fuego, columnas de humo. El sol se oscurecerá, la luna se pondrá color de sangre, antes de que llegue el día grande y terrible del Señor.


Cuando invoquen el nombre del Señor se salvarán, porque en el monte Sión y en Jerusalén quedará un grupo, como lo ha prometido el Señor a los sobrevivientes que ha elegido".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Del salmo 103


R/. Envía, Señor, tu Espíritu, a renovar la tierra. Aleluya.


Bendice al Señor, alma mía; Señor y Dios mío, inmensa es tu grandeza. Te vistes de belleza y majestad, la luz te envuelve como un manto. R/.


¡Qué numerosas son tus obras, Señor, y todas las hiciste con maestría! La tierra está llena de tus creaturas. Bendice al Señor, alma mía. R/.


Todos los vivientes aguardan que les des de comer a su tiempo; les das el alimento y lo recogen, abres tu mano y se sacian de bienes. R/.


Si retiras tu aliento, toda creatura muere y vuelve al polvo. Pero envías tu espíritu, que da vida, y renuevas el aspecto de la tierra. R/.


El Espíritu intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.


De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 8, 22-27


Hermanos: Sabemos que la creación entera gime hasta el presente y sufre dolores de parto; y no sólo ella, sino también nosotros, los que poseemos las primicias del Espíritu, gemimos interiormente, anhelando que se realice plenamente nuestra condición de hijos de Dios, la redención de nuestro cuerpo.


Porque ya es nuestra la salvación, pero su plenitud es todavía objeto de esperanza. Esperar lo que ya se posee no es tener esperanza, porque, ¿cómo se puede esperar lo que ya se posee? En cambio, si esperamos algo que todavía no poseemos, tenemos que esperarlo con paciencia.


El Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad, porque nosotros no sabemos pedir lo que nos conviene; pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras. Y Dios, que conoce profundamente los corazones, sabe lo que el Espíritu quiere decir, porque el Espíritu ruega conforme a la voluntad de Dios, por los que le pertenecen.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



ACLAMACIÓN







R/. Aleluya, aleluya.


Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. R/.


Brotarán ríos de agua que da la vida.


Del santo Evangelio según san Juan: 7, 37-39


El último día de la fiesta, que era el más solemne, exclamó Jesús en voz alta: "El que tenga sed, que venga a mí; y beba, aquel que cree en mí. Como dice la Escritura: Del corazón del que cree en mí brotarán ríos de agua viva".


Al decir esto, se refería al Espíritu Santo que habían de recibir los que creyeran en él, pues aún no había venido el Espíritu, porque Jesús no había sido glorificado.


 Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


Se dice Credo.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Derrama, Señor, sobre estos dones la bendición de tu Espíritu Santo, para que, por medio de ellos, reciba tu Iglesia tan gran efusión de amor, que la impulse a hacer resplandecer en todo el mundo la verdad del misterio de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pentecostés, como en la Misa del día.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 7, 37


El último día de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: El que tenga sed, que venga a mí y beba. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que nos aprovechen, Señor, los dones que hemos recibido, para que estemos siempre llenos del fervor del Espíritu Santo que derramaste de manera tan inefable en tus Apóstoles. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Para despedir al pueblo, el diácono o, en su ausencia, el mismo sacerdote canta o dice:


Anuncien a todos la alegría del Señor resucitado. Vayan en paz, aleluya, aleluya.


O bien:


Pueden ir en paz, aleluya, aleluya.


R/. Demos gracias a Dios, aleluya, aleluya.





MISA DEL DÍA


ANTÍFONA DE ENTRADA  Rm 5, 5; cfr. 8, 11


El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros. Aleluya.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, que por el misterio de la festividad que hoy celebramos santificas a tu Iglesia, extendida por todas las naciones, concede al mundo entero los dones del Espíritu Santo y continúa obrando en el corazón de tus fieles las maravillas que te dignaste realizar en los comienzos de la predicación evangélica. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Todos quedaron llenos del Espíritu Santo y empezaron a hablar.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 2, 1-11


El día de Pentecostés, todos los discípulos estaban reunidos en un mismo lugar. De repente se oyó un gran ruido que venía del cielo, como cuando sopla un viento fuerte, que resonó por toda la casa donde se encontraban. Entonces aparecieron lenguas de fuego, que se distribuyeron y se posaron sobre ellos; se llenaron todos del Espíritu Santo y empezaron a hablar en otros idiomas, según el Espíritu los inducía a expresarse.


En esos días había en Jerusalén judíos devotos, venidos de todas partes del mundo. Al oír el ruido, acudieron en masa y quedaron desconcertados, porque cada uno los oía hablar en su propio idioma.


Atónitos y llenos de admiración, preguntaban: "¿No son galileos todos estos que están hablando? ¿Cómo, pues, los oímos hablar en nuestra lengua nativa? Entre nosotros hay medos, partos y elamitas; otros vivimos en Mesopotamia, Judea, Capadocia, en el Ponto y en Asia, en Frigia y en Panfilia, en Egipto o en la zona de Libia que limita con Cirene. Algunos somos visitantes, venidos de Roma, judíos y prosélitos; también hay cretenses y árabes. Y sin embargo, cada quien los oye hablar de las maravillas de Dios en su propia lengua".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 103


R/. Envía, Señor, tu Espíritu a renovar la tierra. Aleluya.


Bendice al Señor, alma mía; Señor y Dios mío, inmensa es tu grandeza. ¡Qué numerosas son tus obras, Señor! La tierra llena está de tus creaturas. R/.


Si retiras tu aliento, toda creatura muere y vuelve al polvo; pero envías tu espíritu, que da vida, y renuevas el aspecto de la tierra. R/.


Que Dios sea glorificado para siempre y se goce en sus creaturas. Ojalá que le agraden mis palabras y yo me alegraré en el Señor. R/.


Hemos sido bautizados en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo.


De la primera carta del apóstol san Pablo a los corintios: 12, 3-7. 12-13


Hermanos: Nadie puede llamar a Jesús "Señor", si no es bajo la acción del Espíritu Santo.


Hay diferentes dones, pero el Espíritu es el mismo. Hay diferentes servicios, pero el Señor es el mismo. Hay diferentes actividades, pero Dios, que hace todo en todos, es el mismo.


En cada uno se manifiesta el Espíritu para el bien común. Porque así como el cuerpo es uno y tiene muchos miembros y todos ellos, a pesar de ser muchos, forman un solo cuerpo, así también es Cristo. Porque todos nosotros, seamos judíos o no judíos, esclavos o libres, hemos sido bautizados en un mismo Espíritu para formar un solo cuerpo, y a todos se nos ha dado a beber del mismo Espíritu. 


Palabra de Dios. 


Te alabamos, Señor.


SECUENCIA


Ven, Dios Espíritu Santo,y envíanos desde el cielo tu luz, para iluminarnos.


Ven ya, padre de los pobres, luz que penetra en las almas, dador de todos los dones.


Fuente de todo consuelo, amable huésped del alma, paz en las horas de duelo.


Eres pausa en el trabajo; brisa, en un clima de fuego; consuelo, en medio del llanto.


Ven, luz santificadora, y entra hasta el fondo del alma de todos los que te adoran.


Sin tu inspiración divina los hombres nada podemos y el pecado nos domina.


Lava nuestras inmundicias, fecunda nuestros desiertos y cura nuestras heridas.


Doblega nuestra soberbia, calienta nuestra frialdad, endereza nuestras sendas.


Concede a aquellos que ponen en ti su fe y su confianza tus siete sagrados dones.


Danos virtudes y méritos, danos una buena muerte y contigo el gozo eterno.



ACLAMACIÓN





R/. Aleluya, aleluya.


Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. R/.


Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo: Reciban el Espíritu Santo.


Del santo Evangelio según san Juan: 20, 19-23


Al anochecer del día de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: "La paz esté con ustedes". Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Cuando los discípulos vieron al Señor, se llenaron de alegría.


De nuevo les dijo Jesús: "La paz esté con ustedes. Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo". Después de decir esto, sopló sobre ellos y les dijo: "Reciban el Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados, les quedarán perdonados; y a los que no se los perdonen, les quedarán sin perdonar".


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


Se dice Credo.


PLEGARIA UNIVERSAL


Oremos, hermanos, e invoquemos a Cristo, que, sentado a la diestra de Dios, ha recibido del Padre el Espíritu Santo prometido, y pidámosle que lo derrame sobre la Iglesia y sobre todo el mundo.


Después de cada petición diremos: Ven, Espíritu Santo.


Para que Jesús, el Señor, que, exaltado a la diestra de Dios, ha recibido el Espíritu Santo prometido, lo envíe abundantemente sobre la Iglesia. Oremos.


Para que la luz del Espíritu Santo aleje las tinieblas de los hombres, los lleve al conocimiento de la verdad, convierta el odio en amor, los sufrimientos en alegría y las guerras en paz. Oremos.


Para que todos aquellos que han recibido o recibirán próximamente el sacramento de la Confirmación, experimenten la fuerza renovadora del Espíritu Santo como los apóstoles el día de Pentecostés. Oremos.


Para que el Espíritu de sabiduría nos haga penetrar en los secretos de Dios, nos recuerde continuamente lo que Cristo dijo y fortalezca nuestra fe. Oremos.


Escucha, Señor, las oraciones de tu pueblo y concédenos que, renovados y fortalecidos por tu Espíritu, vivamos continuamente la novedad pascual y lleguemos a compartir también las fiestas de la Pascua eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Concédenos, Señor, que, conforme a la promesa de tu Hijo, el Espíritu Santo nos haga comprender con más plenitud el misterio de este sacrificio y haz que nos descubra toda su verdad. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO


El misterio de Pentecostés.


En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno. Porque tú, para llevar a su plenitud el misterio pascual, has enviado hoy al Espíritu Santo sobre aquellos a quienes adoptaste como hijos al injertarlos en Cristo, tu Unigénito. Este mismo Espíritu fue quien, al nacer la Iglesia, dio a conocer a todos los pueblos el misterio del Dios verdadero y unió la diversidad de las lenguas en la confesión de una misma fe.


Por eso, el mundo entero se desborda de alegría y también los coros celestiales, los ángeles y los arcángeles, cantan sin cesar el himno de tu gloria: Santo, Santo, Santo…


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Hch 2, 4. 11


Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y proclamaban las maravillas de Dios. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Dios nuestro, tú que concedes a tu Iglesia dones celestiales consérvale la gracia que le has dado, para que permanezca siempre vivo en ella el don del Espíritu Santo que le infundiste; y que este alimento espiritual nos sirva para alcanzar la salvación eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Para despedir al pueblo, el diácono o, en su ausencia, el mismo sacerdote canta o dice:


Anuncien a todos la alegría del Señor resucitado. Vayan en paz, aleluya, aleluya.


O bien:


Pueden ir en paz, aleluya, aleluya.


R/. Demos gracias a Dios, aleluya, aleluya.

Published in: on 30 mayo, 2020 at 15:48  Comments (1)  

LECTURAS DEL SÁBADO VII DE PASCUA 30 DE MAYO (BLANCO)


Éste es el discípulo que atestigua estas cosas y las ha puesto por escrito, y estamos ciertos de que su testimonio es verdadero.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SANTA JUANA DE ARCO MÁRTIR MILITAR



ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Hch 1, 14


Los discípulos perseveraban unánimes en la oración, junto con María, la Madre de Jesús.


ORACIÓN COLECTA


Dios y padre nuestro, que diste el Espíritu Santo a tus Apóstoles, que oraban junto con María, la Madre de Jesús, concédenos, por intercesión de la Virgen, que te sirvamos con fidelidad y trabajemos eficazmente, con nuestra palabra y ejemplo, en la difusión de tu gloria. Por nuestro Señor Jesucristo.


LITURGIA DE LA PALABRA


Pablo permaneció en Roma y predicaba el Reino de Dios.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 28, 16-20. 30-31


En aquellos días, cuando llegamos a Roma, se le permitió a Pablo vivir en una casa particular, con un soldado de guardia. Tres días después de su llegada, convocó a los judíos principales, y una vez reunidos, les dijo: "Hermanos, sin haber hecho nada en contra de mi pueblo, ni de las tradiciones de nuestros padres, fui preso en Jerusalén y entregado a los romanos. Ellos, después de interrogarme, querían ponerme en libertad, porque no encontraron en mí nada que mereciera la muerte. Pero los judíos se opusieron y tuve que apelar al César, sin pretender por ello acusar a mi pueblo. Por esta razón he querido verlos y hablar con ustedes, pues llevo estas cadenas a causa de la esperanza de Israel".


Dos años enteros pasó Pablo en una casa alquilada; ahí recibía a todos los que acudían a él, predicaba el Reino de Dios y les explicaba la vida de Jesucristo, el Señor, con absoluta libertad y sin estorbo alguno.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 10


R/. El Señor verá a los justos con complacencia. Aleluya.


Desde su santo templo allá en el cielo, donde tiene su trono y su morada, los ojos del Señor miran al mundo y examina a los hombres su mirada. R/.


Examina a inocentes y malvados y aborrece al que ama la violencia. Pues es justo el Señor y ama lo justo, a los justos verá con complacencia. R/.


ACLAMACIÓN   Cfr. Jn 16, 7. 13







R/. Aleluya, aleluya.


Yo les enviaré el Espíritu de la verdad, y él los irá guiando hasta la verdad plena, dice el Señor. R/.


Éste es el discípulo que ha escrito estas cosas, y su testimonio es verdadero.


Del santo Evangelio según san Juan: 21, 20-25


En aquel tiempo, Jesús dijo a Pedro: "Sígueme". Pedro, volviendo la cara, vio que iba detrás de ellos el discípulo a quien Jesús amaba, el mismo que en la cena se había reclinado sobre su pecho y le había preguntado: `Señor, ¿quién es el que te va a traicionar?’ Al verlo, Pedro le dijo a Jesús: "Señor, ¿qué va a pasar con éste?" Jesús le respondió: "Si yo quiero que éste permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué? Tú, sígueme".


Por eso comenzó a correr entre los hermanos el rumor de que ese discípulo no habría de morir. Pero Jesús no dijo que no moriría, sino: ‘Si yo quiero que permanezca vivo hasta que yo vuelva, ¿a ti qué?’


Éste es el discípulo que atestigua estas cosas y las ha puesto por escrito, y estamos ciertos de que su testimonio es verdadero. Muchas otras cosas hizo Jesús y creo que, si se relataran una por una, no cabrían en todo el mundo los libros que se escribieran.


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Dios nuestro, que estas ofrendas alcancen, por tu benevolencia y por la intercesión de la siempre Virgen María, que tu Iglesia crezca por el número de fieles y resplandezca siempre poda abundancia de las virtudes. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio I- V de Santa María Virgen


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Lc 11, 27-28


Dichosa la Virgen María, que llevó en sus entrañas al Hijo del eterno Padre.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Dios nuestro, después de recibir en esta conmemoración de la Virgen María, Reina de los Apóstoles, el alimento que nos da vida te pedimos que nos concedas perseverar en el cumplimiento de tu voluntad, sirviendo siempre a los demás, para que tu pueblo avance en el camino de la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 29 mayo, 2020 at 15:43  Comments (1)  

LECTURAS DEL VIERNES VII DE PASCUA 29 DE MAYO (BLANCO)


"Simón, hijo de Juan, ¿me amas?"





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SANTA ÚRSULA LEDOCHOWSKA RELIGIOSA FUNDADORA


ANTÍFONA DE ENTRADA Apoc 1, 5-6


Cristo nos ama y nos ha purificado de nuestros pecados por medio de su sangre; e hizo de nosotros un reino sacerdotal para Dios su Padre. Aleluya.


ORACIÓN COLECTA


Señor Dios, que mediante la glorificación de tu Ungido y la iluminación de tu Espíritu Santo, nos abriste la entrada a la vida eterna, concédenos que, al participar de tan admirable don, aumente nuestro deseo de servirte y seamos impulsados a crecer en nuestra fe. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Pablo asegura que está vivo un hombre llamado Jesús, que había muerto.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 25, 13-21


En aquellos días, el rey Agripa y Berenice llegaron a Cesarea para saludar a Festo. Como se detuvieron algún tiempo allí, Festo expuso al rey el caso de Pablo con estas palabras: "Tengo aquí un preso que me dejó Félix, cuya condenación me pidieron los sumos sacerdotes y los ancianos de los judíos, cuando estuve en Jerusalén.


Yo les respondí que no era costumbre romana condenar a ningún hombre, sin carearlo antes con sus acusadores, para darle la oportunidad de defenderse de la acusación.


Vinieron conmigo a Cesarea, y sin dar largas al asunto, me senté en el tribunal al día siguiente y mandé que compareciera ese hombre. Los acusadores que se presentaron contra él, no le hicieron cargo de ninguno de los delitos que yo sospechaba.


Se trataba sólo de ciertas discusiones acerca de su religión y de un tal Jesús, ya muerto, que Pablo asegura que está vivo. No sabiendo qué determinación tomar, le pregunté a Pablo si quería ir a Jerusalén para que se le juzgara allá de esos cargos; pero como él pidió ser juzgado por el César, ordené que siguiera detenido hasta que yo pudiera enviárselo".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Del salmo 102



R/. Bendigamos al Señor, que es el rey del universo. Aleluya.


Bendice al Señor, alma mía, que todo mi ser bendiga su santo nombre. Bendice al Señor, alma mía, y no te olvides de sus beneficios. R/.


Como desde la tierra hasta el cielo, así es de grande su misericordia; como dista el oriente del ocaso, así aleja de nosotros nuestros delitos. R/.


En el cielo el Señor puso su trono y su reino abarca el universo. Bendigan al Señor todos los ángeles, ejecutores fieles de sus órdenes. R/.



ACLAMACIÓN   Jn 14, 26






R/. Aleluya, aleluya.



El Espíritu Santo les enseñará todas las cosas y les recordará todo cuanto yo les he dicho, dice el Señor. R/.


Apacienta mis corderos, apacienta mis ovejas.


Del santo Evangelio según san Juan: 21, 15-19


En aquel tiempo, le preguntó Jesús a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?" Él le contestó: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos".


Por segunda vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?" Él le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Pastorea mis ovejas".


Por tercera vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?" Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado por tercera vez si lo quería, y le contestó: "Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas.


Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras". Esto se lo dijo para indicarle con qué género de muerte habría de glorificar a Dios. Después le dijo: "Sígueme".


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Mira propicio, Señor, estas ofrendas de tu pueblo, y para que se hagan aceptables ante ti, haz que la venida de tu Santo Espíritu purifique nuestra conciencia. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pascua o de la Ascensión.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 16, 13


Cuando venga el Espíritu de la verdad, dice el Señor, él los

guiará hasta la verdad plena. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Señor Dios, ya que nos purificas y alimentas con tus misterios, concédenos que nos obtengan la vida eterna puesto que has permitido que los hayamos recibido. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 28 mayo, 2020 at 15:29  Comments (1)  

LECTURAS DEL JUEVES VII DE PASCUA 28 DE MAYO (BLANCO)


Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que me has dado, para que contemplen mi gloria.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN GERMÁN DE PARÍS ABAD Y OBISPO


ANTÍFONA DE ENTRADA Heb 4, 16


Acerquémonos confiadamente al trono de la gracia, a fin de alcanzar su misericordia y su auxilio oportuno. Aleluya.


ORACIÓN COLECTA


Que tu Espíritu, Señor, nos infunda vigorosamente aquellos dones espirituales que nos permitan comprender lo que te agrada y que, por gracia tuya, nos hagan más dóciles a tu voluntad. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.


LITURGIA DE LA PALABRA


Tendrás que dar testimonio de mí en Roma.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 22, 30; 23, 6-11


En aquellos días, el comandante, queriendo saber con exactitud de qué acusaban a Pablo los judíos, mandó que le quitaran las cadenas, convocó a los sumos sacerdotes y a todo el sanedrín, y llevando consigo a Pablo, lo hizo comparecer ante ellos.


Como Pablo sabía que una parte del sanedrín era de saduceos y otra de fariseos, exclamó: "Hermanos: Yo soy fariseo, hijo de fariseos, y me quieren juzgar porque espero la resurrección de los muertos".


Apenas dijo esto, se produjo un altercado entre fariseos y saduceos, que ocasionó la división de la asamblea. (Porque los saduceos niegan la otra vida, sea de ángeles o de espíritus resucitados; mientras que los fariseos admiten ambas cosas).


Estalló luego una terrible gritería y algunos escribas del partido de los fariseos, se pusieron de pie y declararon enérgicamente: "Nosotros no encontramos ningún delito en este hombre. ¿Quién puede decirnos que no le ha hablado un espíritu o un ángel?"


El alboroto llegó a tal grado, que el comandante, temiendo que hicieran pedazos a Pablo, mandó traer a la guarnición para sacarlo de allí y llevárselo al cuartel. En la noche siguiente se le apareció el Señor a Pablo y le dijo: "Ten ánimo, Pablo; porque así como en Jerusalén has dado testimonio de mí, así también tendrás que darlo en Roma".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 15


R/. Enséñanos, Señor, el camino de la vida. Aleluya.


Protégeme, Dios mío, pues eres mi refugio. Yo siempre he dicho que tú eres mi Señor. El Señor es la parte que me ha tocado en herencia; mi vida está en sus manos. R/.


Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye internamente. Tengo siempre presente al Señor y con él a mi lado, jamás tropezaré. R/.


Por eso se me alegran el corazón y el alma, y mi cuerpo vivirá tranquilo, porque tú no me abandonarás a la muerte ni dejarás que sufra yo la corrupción. R/.


Enséñame el camino de la vida, sáciame de gozo en tu presencia y de alegría perpetua junto a ti. R/.



ACLAMACIÓN   Jn 17, 21



R/. Aleluya, aleluya.



Que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti somos uno, a fin de que el mundo crea que tú me has enviado, dice el Señor. R/.


Que su unidad sea perfecta.


Del santo Evangelio según san Juan: 17, 20-26


En aquel tiempo, Jesús levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre, no sólo te pido por mis discípulos, sino también por los que van a creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti somos uno, a fin de que sean uno en nosotros y el mundo crea que tú me has enviado.


Yo les he dado la gloria que tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno. Yo en ellos y tú en mí, para que su unidad sea perfecta y así el mundo conozca que tú me has enviado y que los amas, como me amas a mí.


Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que me has dado, para que contemplen mi gloria, la que me diste, porque me has amado desde antes de la creación del mundo.


Padre justo, el mundo no te ha conocido; pero yo sí te conozco y éstos han conocido que tú me enviaste. Yo les he dado a conocer tu nombre y se lo seguiré dando a conocer, para que el amor con que me amas esté en ellos y yo también en ellos".


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pascua o de la Ascensión.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 16, 7


Yo les aseguro, dice el Señor: Les conviene que yo me vaya, porque si no me voy, el Paráclito no vendrá a ustedes. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que los misterios que hemos recibido, Señor, iluminen nuestra fe con sus enseñanzas y por su participación nos renueven, para que merezcamos alcanzar los dones de tu Espíritu. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 27 mayo, 2020 at 15:32  Deja un comentario  

LECTURAS DEL MIÉRCOLES VII DE PASCUA 27 DE MAYO (BLANCO)


Ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN AGUSTÍN DE CANTERBURY OBISPO


ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 46, 2


Pueblos todos, aplaudan y aclamen a Dios con gritos de júbilo. Aleluya.


ORACIÓN COLECTA


Dios misericordioso, concede benignamente a tu Iglesia que, congregada por el Espíritu Santo, te sirva con todo su corazón y permanezca con sinceridad en comunión fraterna. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Ahora los dejo en manos de Dios, que puede hacerlos crecer y alcanzar la herencia prometida.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 20, 28-38


En aquellos días, Pablo dijo a los presbíteros de la comunidad cristiana de Éfeso: "Miren por ustedes mismos y por todo el rebaño, del que los constituyó pastores el Espíritu Santo, para apacentar a la Iglesia que Dios adquirió con la sangre de su Hijo.


Yo sé que después de mi partida, se introducirán entre ustedes lobos rapaces, que no tendrán piedad del rebaño y sé que, de entre ustedes mismos, surgirán hombres que predicarán doctrinas perversas y arrastrarán a los fieles detrás de sí. Por eso estén alerta. Acuérdense que durante tres años, ni de día ni de noche he dejado de aconsejar, con lágrimas en los ojos, a cada uno de ustedes.


Ahora los encomiendo a Dios y a su palabra salvadora, la cual tiene fuerza para que todos los consagrados a Dios crezcan en el espíritu y alcancen la herencia prometida. Yo no he codiciado ni el oro ni la plata ni la ropa de nadie. Bien saben que cuanto he necesitado para mí y para mis compañeros, lo he ganado con mis manos. Siempre he mostrado que hay que trabajar así, para ayudar como se debe a los necesitados, recordando las palabras del Señor Jesús: ‘Hay más felicidad en dar que en recibir’ ".


Dicho esto, se arrodilló para orar con todos ellos. Todos se pusieron a llorar y abrazaban y besaban a Pablo, afligidos, sobre todo, porque les había dicho que no lo volverían a ver. Y todos lo acompañaron hasta el barco.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 67


R/. Reyes de la tierra, canten al Señor. Aleluya.


Señor, despliega tu poder, reafirma lo que has hecho por nosotros, desde Jerusalén, desde tu templo, a donde vienen los reyes con sus dones. R/.


Cántenle al Señor, reyes de la tierra, denle gloria al Señor que recorre los cielos seculares, y que dice con voz como de trueno: "Glorifiquen a Dios". R/.


Sobre Israel su majestad se extiende y su poder, sobre las nubes. Bendito sea nuestro Dios. R/.



ACLAMACIÓN   Cfr. Jn 17, 17






R/. Aleluya, aleluya.


Tu palabra, Señor, es la verdad; santifícanos en la verdad. R/.


Padre, que ellos sean uno, como nosotros.


Del santo Evangelio según san Juan: 17, 11-19


En aquel tiempo, Jesús levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre santo, cuida en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno, como nosotros. Cuando estaba con ellos, yo cuidaba en tu nombre a los que me diste; yo velaba por ellos y ninguno de ellos se perdió, excepto el que tenía que perderse, para que se cumpliera la Escritura.


Pero ahora voy a ti, y mientras estoy aún en el mundo, digo estas cosas para que mi gozo llegue a su plenitud en ellos. Yo les he entregado tu palabra y el mundo los odia, porque no son del mundo, como yo tampoco soy del mundo. No te pido que los saques del mundo, sino que los libres del mal. Ellos no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.


Santifícalos en la verdad. Tu palabra es la verdad. Así como tú me enviaste al mundo, así los envío yo también al mundo. Yo me santifico a mí mismo por ellos, para que también ellos sean santificados en la verdad". 


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Acepta, Señor, el sacrificio que tú mismo nos mandaste ofrecer, y, por estos sagrados misterios, que celebramos en cumplimiento de nuestro servicio, dígnate llevar a cabo en nosotros la santificación que proviene de tu redención. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pascua o de la Ascensión.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 26-27


Cuando venga el Abogado que yo les enviaré, el Espíritu de la verdad que procede del Padre, dará testimonio de mí, dice el Señor, y también ustedes darán testimonio. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que la participación en este sacramento celestial, multiplique en nosotros tu gracia, Señor, y, purificándonos con su poder, nos haga siempre más capaces de seguir recibiendo tan admirable don. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 26 mayo, 2020 at 15:08  Comments (1)  

LECTURAS DEL MARTES VII DE PASCUA 26 DE MAYO MEMORIA DE SAN FELIPE NERI PRESBÍTERO (BLANCO)


La vida eterna consiste en que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.



ANTIFONA DE ENTRADA Rom 5, 5; Cfr. 8, 11


El amor de Dios ha sido infundido en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que habita en nosotros.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, que nunca dejas de glorificar la santidad de aquellos siervos tuyos que te son fieles, haz que el fuego del Espíritu Santo nos encienda en aquel mismo ardor que tan maravillosamente inflamó el corazón de san Felipe Neri. Por nuestro Señor Jesucristo …


LITURGIA DE LA PALABRA


Quiero llegar al fin de mi carrera y cumplir el encargo que recibí del Señor Jesús.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 20, 17-27


En aquellos días, hallándose Pablo en Mileto, mandó llamar a los presbíteros de la comunidad cristiana de Éfeso. Cuando se presentaron, les dijo: "Bien saben cómo me he comportado entre ustedes, desde el primer día en que puse el pie en Asia: he servido al Señor con toda humildad, en medio de penas y tribulaciones, que han venido sobre mí por las asechanzas de los judíos. También saben que no he escatimado nada que fuera útil para anunciarles el Evangelio, para enseñarles públicamente y en las casas, y para exhortar con todo empeño a judíos y griegos a que se arrepientan delante de Dios y crean en nuestro Señor Jesucristo.


Ahora me dirijo a Jerusalén, encadenado en el espíritu, sin saber qué sucederá allá. Sólo sé que el Espíritu Santo en cada ciudad me anuncia que me aguardan cárceles y tribulaciones. Pero la vida, para mí, no vale nada. Lo que me importa es llegar al fin de mi carrera y cumplir el encargo que recibí del Señor Jesús: anunciar el Evangelio de la gracia de Dios.


Por lo pronto sé que ninguno de ustedes, a quienes he predicado el Reino de Dios, volverá a verme. Por eso declaro hoy que no soy responsable de la suerte de nadie, porque no les he ocultado nada y les he revelado en su totalidad el plan de Dios".


Palabra de Dios. 


Te alabamos, Señor.



Del salmo 67


R/. Reyes de la tierra, canten al Señor. Aleluya.


A tu pueblo extenuado diste fuerzas, nos colmaste, Señor, de tus favores y habitó tu rebaño en esta tierra, que tu amor preparó para los pobres. R/.


Bendito sea el Señor, día tras día, que nos lleve en sus alas y nos salve. Nuestro Dios es un Dios de salvación porque puede librarnos de la muerte. R/.



ACLAMACIÓN   Jn 14, 16






R/. Aleluya, aleluya.



Yo le rogaré al Padre y él les dará otro Paráclito para que esté siempre con ustedes, dice el Señor. R/.


Padre, glorifica a tu Hijo.


Del santo Evangelio según san Juan: 17, 1-11


En aquel tiempo, Jesús levantó los ojos al cielo y dijo: "Padre, ha llegado la hora. Glorifica a tu Hijo, para que tu Hijo también te glorifique, y por el poder que le diste sobre toda la humanidad, dé la vida eterna a cuantos le has confiado. La vida eterna consiste en que te conozcan a ti, único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú has enviado.


Yo te he glorificado sobre la tierra, llevando a cabo la obra que me encomendaste. Ahora, Padre, glorificame en ti con la gloria que tenía, antes de que el mundo existiera.


He manifestado tu nombre a los hombres que tú tomaste del mundo y me diste. Eran tuyos y tú me los diste. Ellos han cumplido tu palabra y ahora conocen que todo lo que me has dado viene de ti, porque yo les he comunicado las palabras que tú me diste; ellos las han recibido y ahora reconocen que yo salí de ti y creen que tú me has enviado.


Te pido por ellos; no te pido por el mundo, sino por éstos, que tú me diste, porque son tuyos. Todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío. Yo he sido glorificado en ellos. Ya no estaré más en el mundo, pues voy a ti; pero ellos se quedan en el mundo".


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Al ofrecer te, Señor, este sacrificio de alabanza, te rogamos que, a ejemplo de san Felipe Neri nos mostremos siempre alegres y bien dispuestos, para promover la gloria de tu nombre y el servicio del prójimo. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pascua, o de la Ascensión,


ANTIFONA DE LA COMUNIÓN Jn 15, 9


Así como el Padre me ha amado a mí, así yo los he amado a ustedes, dice el Señor; permanezcan, pues, en mi amor. Aleluya


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Saciados, Señor, por este manjar celestial, te rogamos que, a imitación de san Felipe Neri, nos hagas anhelar siempre este mismo sustento por el cual verdaderamente vivimos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 25 mayo, 2020 at 15:47  Comments (1)  

LECTURAS DEL LUNES VII DE PASCUA 25 DE MAYO (BLANCO)


En el mundo tendrán tribulaciones; pero tengan valor, porque yo he vencido al mundo.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN BEDA EL VENERABLE PRESBÍTERO Y DOCTOR DE LA IGLESIA


ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 1, 8


Recibirán la fuerza del Espíritu Santo, que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos hasta los confines de la tierra. Aleluya.


ORACIÓN COLECTA


Descienda sobre nosotros, Señor, la fuerza del Espíritu Santo, para que podamos cumplir fielmente tu voluntad y manifestarla con una vida santa. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


¿Han recibido el Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 19, 1-8


En aquellos días, mientras Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó las regiones altas de Galacia y Frigia y bajó a Éfeso. Encontró allí a unos discípulos y les preguntó: "¿Han recibido el Espíritu Santo, cuando abrazaron la fe?" Ellos respondieron: "Ni siquiera hemos oído decir que exista el Espíritu Santo". Pablo replicó: "Entonces, ¿qué bautismo han recibido?" Ellos respondieron: "El bautismo de Juan".


Pablo les dijo: "Juan bautizó con un bautismo de conversión, pero advirtiendo al pueblo que debían creer en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús".


Al oír esto, los discípulos fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús, y cuando Pablo les impuso las manos, descendió el Espíritu Santo y comenzaron a hablar lenguas desconocidas y a profetizar. Eran en total unos doce hombres.


Durante los tres meses siguientes, Pablo frecuentó la sinagoga y habló con toda libertad, disputando acerca del Reino de Dios y tratando de convencerlos.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 67


R/. Cantemos a Dios un canto de alabanza. Aleluya.


Cuando el Señor actúa sus enemigos se dispersan y huyen ante su faz los que lo odian; cual se disipa el humo, se disipan; como la cera se derrite al fuego, así ante Dios perecen los malvados. R/.


Ante el Señor, su Dios, gocen los justos y salten de alegría. Entonen alabanzas a su nombre. En honor del Señor toquen la cítara. R/.


Porque el Señor, desde su templo santo, a huérfanos y viudas da su auxilio; él fue quien dio a los desvalidos casa, libertad y riqueza a los cautivos. R/.



ACLAMACIÓN Col 3, 1




R/. Aleluya, aleluya.


Puesto que han resucitado con Cristo, busquen los bienes de arriba, donde está Cristo, sentado a la derecha de Dios. R/.


Tengan valor, porque yo he vencido al mundo.


Del santo Evangelio según san Juan: 16, 29-33


En aquel tiempo, los discípulos le dijeron a Jesús: "Ahora sí nos estás hablando claro y no en parábolas. Ahora sí estamos convencidos de que lo sabes todo y no necesitas que nadie te pregunte. Por eso creemos que has venido de Dios".


Les contestó Jesús: "¿De veras creen? Pues miren que viene la hora, más aún, ya llegó, en que se van a dispersar cada uno por su lado y me dejarán solo. Sin embargo, no estaré solo, porque el Padre está conmigo. Les he dicho estas cosas, para que tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulaciones; pero tengan valor, porque yo he vencido al mundo".


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Que este sacrificio inmaculado nos purifique, Señor, y fortalezca nuestros corazones con el poder divino de tu gracia. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Pascua o de la Ascensión.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 14, 18; 16, 22


No los dejaré huérfanos, dice el Señor; vendré de nuevo a ustedes y se alegrarán sus corazones. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Señor, muéstrate benigno con tu pueblo, y ya que te dignaste alimentarlo con los misterios celestiales, hazlo pasar de su antigua condición de pecado a una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Puede utilizarse la fórmula de bendición sobre el pueblo.

Published in: on 24 mayo, 2020 at 15:24  Comments (1)  

LECTURAS DEL DOMINGO VII DE PASCUA SOLEMNIDAD DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR 24 DE MAYO (BLANCO)


Vayan, pues, y hagan discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.




RESPUESTAS DE FE S.D.A.


MARÍA AUXILIADORA


MISA DE LA VIGILIA


Esta Misa se dice en la tarde del día que precede a la solemnidad, ya sea antes o después de las primeras Vísperas de la Ascensión.


ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 67, 33. 35


Canten a Dios, reinos de la tierra, toquen para el Señor, que asciende sobre los cielos; su majestad y su poder resplandecen sobre las nubes. Aleluya.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA


Dios eterno, cuyo Hijo subió hoy al cielo en presencia de sus Apóstoles, te pedimos nos concedas que él, de acuerdo a su promesa, permanezca siempre con nosotros en la tierra, y nos permita vivir con él en el cielo. Él, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.


En la celebración de la Misa de la Vigilia se utiliza el mismo formulario de lecturas que en la Misa del día de la Ascensión del Señor, tal como aparecen más adelante.


Se dice Credo.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Dios eterno, cuyo Unigénito, nuestro mediador, vive para siempre y está sentado a tu derecha para interceder por nosotros, concédenos acercarnos llenos de confianza al trono de la gracia y obtener así tu misericordia. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO I DE LA ASCENSIÓN


En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.


Porque el Señor Jesús, Rey de la gloria, triunfador del pecado y de la muerte, ante la admiración de los ángeles, ascendió (hoy) a lo más alto de los cielos, como Mediador entre Dios y los hombres, Juez del mundo y Señor de los espíritus celestiales.


No se fue para alejarse de nuestra pequeñez, sino para que pusiéramos nuestra confianza en llegar, como miembros suyos, a donde él, nuestra cabeza y principio, nos ha precedido.


Por eso, con esta efusión del gozo pascual, el mundo entero se desborda de alegría y también los coros celestiales, los ángeles y los arcángeles, cantan sin cesar el himno de tu gloria: Santo, Santo, Santo …


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Hb 10, 12


Cristo ofreció un solo sacrificio por el pecado, y se sentó para siempre a la derecha de Dios. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Te pedimos, Señor, que los dones que hemos recibido de tu altar, enciendan en nuestros corazones el deseo de la patria celeste, para que, siguiendo las huellas de nuestro Salvador, tendamos siempre a la meta a donde nos ha precedido. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos. 



Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne



MISA DEL DÍA


ANTÍFONA DE ENTRADA Hch 1, 11


Hombres de Galilea, ¿qué hacen allí parados mirando al cielo? Ese mismo Jesús, que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto marcharse. Aleluya.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA


Concédenos, Dios todopoderoso, rebosar de santa alegría y, gozosos, elevar a ti fervorosas gracias ya que la ascensión de Cristo, tu Hijo, es también nuestra victoria, pues a donde llegó él, que es nuestra cabeza, esperamos llegar también nosotros, que somos su cuerpo. Por nuestro Señor Jesucristo..


LITURGIA DE LA PALABRA


Se fue elevando a la vista de sus apóstoles.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 1, 1-11


En mi primer libro, querido Teófilo, escribí acerca de todo lo que Jesús hizo y enseñó, hasta el día en que ascendió al cielo, después de dar sus instrucciones, por medio del Espíritu Santo, a los apóstoles que había elegido. A ellos se les apareció después de la pasión, les dio numerosas pruebas de que estaba vivo y durante cuarenta días se dejó ver por ellos y les habló del Reino de Dios.


Un día, estando con ellos a la mesa, les mandó: "No se alejen de Jerusalén. Aguarden aquí a que se cumpla la promesa de mi Padre, de la que ya les he hablado: Juan bautizó con agua; dentro de pocos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo".


Los ahí reunidos le preguntaban: "Señor, ¿ahora sí vas a restablecer la soberanía de Israel?" Jesús les contestó: "A ustedes no les toca conocer el tiempo y la hora que el Padre ha determinado con su autoridad; pero cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes, los llenará de fortaleza y serán mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los últimos rincones de la tierra".


Dicho esto, se fue elevando a la vista de ellos, hasta que una nube lo ocultó a sus ojos. Mientras miraban fijamente al cielo, viéndolo alejarse, se les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron: "Galileos, ¿qué hacen allí parados, mirando al cielo? Ese mismo Jesús que los ha dejado para subir al cielo, volverá como lo han visto alejarse".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 46


R/. Entre voces de júbilo, Dios asciende a su trono. Aleluya.


Aplaudan, pueblos todos; aclamen al Señor, de gozo llenos; que el Señor, el Altísimo, es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.


Entre voces de júbilo y trompetas, Dios, el Señor, asciende hasta su trono. Cantemos en honor de nuestro Dios, al rey honremos y cantemos todos. R/.


Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.


Lo hizo sentar a su derecha en el cielo.


De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 1, 17-23


Hermanos: Pido al Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, que les conceda espíritu de sabiduría y de revelación para conocerlo.


Le pido que les ilumine la mente para que comprendan cuál es la esperanza que les da su llamamiento, cuán gloriosa y rica es la herencia que Dios da a los que son suyos y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para con nosotros, los que confiamos en él, por la eficacia de su fuerza poderosa.

Con esta fuerza resucitó a Cristo de entre los muertos y lo hizo sentar a su derecha en el cielo, por encima de todos los ángeles, principados, potestades, virtudes y dominaciones, y por encima de cualquier persona, no sólo del mundo actual sino también del futuro.

Todo lo puso bajo sus pies y a él mismo lo constituyó cabeza suprema de la Iglesia, que es su cuerpo, y la plenitud del que lo consuma todo en todo.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


ACLAMACIÓN Mt 28, 19. 20



R/. Aleluya, aleluya.


Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos, dice el Señor, y sepan que yo estoy con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. R/.


Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra.


Del santo Evangelio según san Mateo: 28, 16-20


En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea y subieron al monte en el que Jesús los había citado. Al ver a Jesús, se postraron, aunque algunos titubeaban.


Entonces, Jesús se acercó a ellos y les dijo: "Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, y hagan discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a cumplir todo cuanto yo les he mandado; y sepan que yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo". 


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


Se dice Credo.


PLEGARIA UNIVERSAL


Pongamos, hermanos, nuestra mirada en Jesús, nuestro gran sacerdote, que ha atravesado el cielo para interceder por nosotros, y pidámosle por las necesidades de todos los hombres.


Después de cada petición diremos: Jesús resucitado, escúchanos.


Por la Iglesia, que lucha en medio de las dificultades del mundo, para que Cristo, desde el trono de su gloria, venga en su ayuda y la libre de todo mal. Oremos.


Por los que todavía no conocen a Cristo, para que él los atraiga hacia sí, como lo prometió el día de su Ascensión. Oremos.


Por los que sufren enfermedades en el cuerpo o angustias en el espíritu, para que el Señor, que con su triunfo ha glorificado nuestra carne colocándola cerca de Dios Padre, los llene de esperanza. Oremos.


Por los que hoy estamos aquí reunidos, para que el Señor, elevado al cielo, nos envíe el Espíritu Santo, que nos enseñe a amar los bienes de arriba. Oremos.


Dios, Padre todopoderoso, que has resucitado a Cristo, tu Hijo, y lo has hecho Señor del universo, escucha las oraciones de tu Iglesia y concédenos lo que, con fe, te hemos pedido. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Al ofrecerte, Señor, este sacrificio en la gloriosa festividad de la ascensión, concédenos que por este santo intercambio, nos elevemos también nosotros a las cosas del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.


PREFACIO I DE LA ASCENSIÓN


En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.


Porque el Señor Jesús, Rey de la gloria, triunfador del pecado y de la muerte, ante la admiración de los ángeles, ascendió (hoy) a lo más alto de los cielos, como Mediador entre Dios y los hombres, Juez del mundo y Señor de los espíritus celestiales.


No se fue para alejarse de nuestra pequeñez, sino para que pusiéramos nuestra confianza en llegar, como miembros suyos, a donde él, nuestra cabeza y principio, nos ha precedido.


Por eso, con esta efusión del gozo pascual, el mundo entero se desborda de alegría y también los coros celestiales, los ángeles y los arcángeles, cantan sin cesar el himno de tu gloria: Santo, Santo, Santo …


Si se usa el Canon Romano, se dice Reunidos en comunión propio. En las otras Plegarias eucarísticas también se dicen las partes propias para esta Misa.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 28, 20


Yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Dios todopoderoso y eterno, que nos permites participar en la tierra de los misterios divinos, concede que nuestro fervor cristiano nos oriente hacia el cielo, donde ya nuestra naturaleza humana está contigo. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne

Published in: on 23 mayo, 2020 at 15:41  Comments (1)  

LECTURAS DEL SÁBADO VI DE PASCUA 23 DE MAYO (BLANCO)


Yo les aseguro: cuanto pidan al Padre en mi nombre, se lo concederá.





RESPUESTAS DE FE S.D.A.


SAN JUAN BAUTISTA DE ROSSI PRESBÍTERO


ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 1 Pe 2,9


Pueblo redimido por Dios, anuncia las maravillas del Señor, que te llamó de las tinieblas a su luz admirable. Aleluya.


ORACIÓN COLECTA


Señor Dios, cuyo Hijo, al subir a los cielos, se dignó prometer a sus Apóstoles el Espíritu Santo, concédenos que, así como ellos recibieron los dones para proclamar de muchos modos las celestiales enseñanzas, así también nos otorgues a nosotros los dones espirituales. Por nuestro Señor Jesucristo …


LITURGIA DE LA PALABRA


El judío Apolo demostró, por medio de la Escritura, que Jesús es el Mesías.


Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 18, 23-28


En aquellos días, después de haber estado en Antioquía algún tiempo, emprendió Pablo otro viaje y recorrió Galacia y Frigia, confirmando en la fe a los discípulos. Un judío, natural de Alejandría, llamado Apolo, hombre elocuente y muy versado en las Escrituras, había ido a Éfeso. Aquel hombre estaba instruido en la doctrina del Señor, y siendo de ferviente espíritu, disertaba y enseñaba con exactitud lo concerniente a Jesús, aunque no conocía más que el bautismo de Juan. Apolo comenzó a hablar valientemente en la sinagoga. Cuando lo oyeron Priscila y Aquila, lo tomaron por su cuenta y le explicaron con mayor exactitud la doctrina del Señor. Como él deseaba pasar a Grecia, los hermanos lo animaron y escribieron a los discípulos de allá para que lo recibieran bien. Cuando llegó, contribuyó mucho, con la ayuda de la gracia, al provecho de los creyentes, pues refutaba vigorosamente en público a los judíos, demostrando, por medio de las Escrituras, que Jesús era el Mesías.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 46


R/. Dios es el rey del universo. Aleluya.


Aplaudan, pueblos todos; aclamen al Señor, de gozo llenos, que el Señor, el Altísimo, es terrible y de toda la tierra, rey supremo. R/.


Porque Dios es el rey del universo, cantemos el mejor de nuestros cantos. Reina Dios sobre todas las naciones desde su trono santo. R/.


Los jefes de los pueblos se han reunido con el pueblo de Dios, Dios de Abraham, porque de Dios son los grandes de la tierra. Por encima de todo Dios está. R/.



ACLAMACIÓN cfr. Jn 16, 28





R/. Aleluya, aleluya.



Salí del Padre y vine al mundo, ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre, dice el Señor. R/.


El Padre mismo los ama, porque ustedes me han amado y han creído que salí del Padre.


Del santo Evangelio según san Juan: 16, 23-28


En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Yo les aseguro: cuanto pidan al Padre en mi nombre, se lo concederá. Hasta ahora no han pedido nada en mi nombre. Pidan y recibirán, para que su alegría sea completa.


Les he dicho estas cosas en parábolas; pero se acerca la hora en que ya no les hablaré en parábolas, sino que les hablaré del Padre abiertamente. En aquel día pedirán en mi nombre, y no les digo que rogaré por ustedes al Padre, pues el Padre mismo los ama, porque ustedes me han amado y han creído que salí del Padre. Yo salí del Padre y vine al mundo; ahora dejo el mundo y vuelvo al Padre". 


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Santifica, Señor, por tu piedad, estos dones y, al recibir en oblación este sacrificio espiritual, conviértenos para ti en una perenne ofrenda. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 17, 24


Padre, quiero que donde yo esté, estén también conmigo los que tú me diste, dice el Señor. Aleluya.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Al recibir, Señor, el don de estos sagrados misterios, te suplicamos humildemente que lo que tu Hijo nos mandó celebrar en memoria suya nos aproveche para crecer en nuestra caridad fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 22 mayo, 2020 at 15:47  Comments (1)