LECTURAS DEL VIERNES XXVI DEL T. ORDINARIO 30 DE SEPTIEMBRE SAN JERÓNIMO


El que los rechaza a ustedes, a mi me rechaza y el que me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado".




SAN JERÓNIMO


ANTÍFONA DE ENTRADA (Jos 1, 8)



Que las palabras de Dios estén siempre sobre tus labios; medítalas día y noche, cumple todo lo que manda el Señor para que tu vida tenga sentido y valor.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, tú que otorgaste a san Jerónimo el don de conocer y amar profundamente la Sagrada Escritura, concédenos descubrir en tu palabra la historia de tu amor por nosotros y el camino de nuestra salvación. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Hemos pecado contra el Señor y no le hemos hecho caso.



Del libro del profeta Baruc: 1, 15-22

 


"Reconocemos que el Señor, Dios nuestro, es justo, y todos nosotros, los habitantes de Judea y de Jerusalén, nuestros reyes y príncipes, nuestros sacerdotes, profetas y padres, nos sentimos hoy llenos de vergüenza, porque hemos pecado contra el Señor y no le hemos hecho caso; lo hemos desobedecido y no hemos escuchado su voz ni hemos cumplido los mandamientos que Él nos dio.


Desde el día en que el Señor sacó de Egipto a nuestros padres hasta el día de hoy, no hemos obedecido al Señor, nuestro Dios, y nos hemos obstinado en no escuchar su voz.

Por eso han caído ahora sobre nosotros las desgracias y la maldición que el Señor anunció por medio de Moisés, su siervo, el día en que sacó de Egipto a nuestros padres, para damos una tierra que mana leche y miel.

 

No hemos escuchado la voz del Señor, nuestro Dios, conforme a las palabras de los profetas que nos ha enviado y todos nosotros, siguiendo las inclinaciones de nuestro perverso corazón, hemos adorado a dioses extraños y hemos hecho lo que el Señor, nuestro Dios, reprueba".

 

 Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.

 


Del salmo 78



R/. Sálvanos, Señor, y perdona nuestros pecados.


Dios mío, los paganos han invadido tu propiedad, han profanado tu santo templo, y han convertido a Jerusalén en ruinas. R/.

 

Han echado los cadáveres de tus siervos a las aves de rapiña, y la carne de tus fieles a los animales feroces. R/.

 

Hemos sido el escarnio de nuestros vecinos, la irrisión y la burla de los que nos rodean. ¿Hasta cuándo, Señor, vas a estar enojado y arderá como fuego tu ira? R/.

 

No recuerdes, Señor, contra nosotros las culpas de nuestros padres. Que tu amor venga pronto a socorrernos, porque estamos totalmente abatidos. R/.

 

Para que sepan quién eres, socórrenos, Dios y salvador nuestro. Para que sepan quién eres, sálvanos y perdona nuestros pecados. R/.

 


ACLAMACIÓN (cfr Sal 94, 8)







R/. Aleluya, aleluya.


 

Hagámosle caso al Señor, que nos dice: "No endurezcan su corazón". R/.



El que me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.



Del santo Evangelio según san Lucas; 10, 13-16


En aquel tiempo, Jesús dijo: "¡Ay de ti, ciudad de Corozaín! ¡Ay de ti, ciudad de Betsaida! Porque si en las ciudades de Tiro y de Sidón se hubieran realizado los prodigios que se han hecho en ustedes, hace mucho tiempo que hubieran hecho penitencia, cubiertas de sayal y de ceniza. Por eso el día del juicio será menos severo para Tiro y Sidón que para ustedes. Y tú, Cafarnaúm, ¿crees que serás encumbrada hasta el cielo? No. Serás precipitada en el abismo". Luego, Jesús dijo a sus discípulos: "El que los escucha a ustedes, a mí me escucha; el que los rechaza a ustedes, a mi me rechaza y el que me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado".


 Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Acepta, Señor, nuestros dones y haz que, iluminados interiormente por tu palabra, a ejemplo de san Jerónimo, nos acerquemos con fe viva a tu altar para ofrecerte el sacrificio de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jer 15, 16)


Tu palabra, Señor, es mi alimento. Tu palabra es el gozo y la alegría de mi corazón.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que esta Eucaristía que hemos celebrado en la festividad de san Jerónimo ilumine, Señor, nuestro espíritu, para que podamos encontrar en tu Evangelio el camino, la verdad y la vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 29 septiembre, 2011 at 20:26  Deja un comentario  

LECTURAS DEL JUEVES XXVI DEL T. ORDINARIO 29 DE SEPTIEMBRE SAN MIGUEL, SAN GABRIEL Y SAN RAFAEL ARCÁNGELES.


"Yo les aseguro que verán el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre".





SAN MIGUEL, SAN GABRIEL Y SAN RAFAEL ARCÁNGELES


Junto con estos tres arcángeles, celebramos hoy a todos los ángeles, que, desde el paraíso del Génesis, hasta el del Apocalipsis, llenan con su intervención invisible el desarrollo de la historia de la salvación. Son mensajeros del Señor, que nos descubren sus secretos y nos trasmiten sus órdenes. Y son los primeros adoradores del Dios vivo, en medio de una muchedumbre inmensa.


ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 102, 20)


Ángeles del Señor, bendíganlo; ustedes, los poderosos ejecutores de sus órdenes, los que están prontos a obedecer su palabra, bendigan al Señor.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA


Dios todopoderoso, que con providencia admirable has confiado a los ángeles y a los hombres su misión particular, haz que quienes te sirven constantemente en el cielo nos protejan siempre en la tierra. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Millones y millones estaban a sus órdenes.


Del libro del profeta Daniel: 7, 9-10. 13-14

 


Yo, Daniel, tuve una visión nocturna: Vi que colocaban unos tronos y un anciano se sentó. Su vestido era blanco como la nieve, y sus cabellos, blancos como lana. Su trono, llamas de fuego, con ruedas encendidas. Un río de fuego brotaba delante de él. Miles y miles lo servían, millones y millones estaban a sus órdenes. Comenzó el juicio y se abrieron los libros.


Yo seguí contemplando en mi visión nocturna y vi a alguien semejante a un hijo de hombre, que venía entre las nubes del cielo. Avanzó hacia el anciano de muchos siglos y fue introducido a su presencia. Entonces recibió la soberanía, la gloria y el reino. Y todos los pueblos y naciones de todas las lenguas lo servían. Su poder nunca se acabará, porque es un poder eterno, y su reino jamás será destruido.


Palabra de Dios.


 Te alabamos, Señor.

 


Del salmo 137


R/. Te cantaremos, Señor, delante de tus ángeles.


De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo. R/.

 

Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor: siempre que te invocamos nos oíste y nos llenaste de valor. R/.

 

Que todos los reyes de la tierra te reconozcan, al escuchar tus prodigios. Que alaben tus caminos, porque tu gloria es inmensa. R/.

 


ACLAMACIÓN (Sal 102, 21)






R/. Aleluya, aleluya.


Que bendigan al Señor todos sus ejércitos, servidores fieles que cumplen su voluntad. R/.

 

 

 

 

Verán a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre.

 

Del santo Evangelio según san Juan: 1, 47-51


En aquel tiempo, cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo: "Este es un verdadero israelita en el que no hay doblez". Natanael le preguntó: "¿De dónde me conoces?". Jesús le respondió: "Antes de que Felipe te llamara, te vi cuando estabas debajo de la higuera".


Respondió Natanael: "Maestro, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el rey de Israel". Jesús le contestó: "Tú crees, porque te he dicho que te vi debajo de la higuera. Mayores cosas has de ver". Después añadió: "Yo les aseguro que verán el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre".


 Palabra del Señor.


 Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Haz, Señor, que tus ángeles lleven ante ti los dones que te presentamos y que este sacrificio sea para todos los hombres fuente de vida y salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de los ángeles.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 137, 1)


Te damos gracias de todo corazón, porque cuando te invocamos, Señor, nos escuchaste. En presencia de los ángeles cantaremos, Dios nuestro, tus alabanzas


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que nos fortalezca, Señor, el pan celestial con que nos has alimentado, para que caminemos seguros por la senda de la salvación bajo la fiel custodia de los ángeles. Por Jesucristo, nuestro Señor.


 REFLEXIÓN: • San Miguel –que en hebreo significa “¿Quién como Dios?”–, es mencionado en el libro de Daniel (10, 13; 12, 1) como ayudante y defensor del pueblo de Dios. La Carta de San Judas lo presenta luchando contra Satanás por el cuerpo de Moisés (1, 9), y el Apocalipsis nos recuerda el combate de Miguel y de sus ángeles contra el dragón (12, 7). • De San Gabriel –“Fortaleza de Dios”–, se habla también en el libro de Daniel (8, 16; 9, 21) y en las apariciones en el contexto del nacimiento de Jesús y de su precursor (Lc 1, 19; 1,5-22.26-38). • SanRafael –“Medicina de Dios”–, aparece en todo el libro de Tobías como compañero de viaje del joven Tobías y portador de salud al viejo y ciego padre. Hablando de los ángeles nos dice la Carta a los Hebreos: «¿Es que no son todos ellos espíritus servidores con la misión de asistir a los que han de heredar la salvación?» (Heb 1, 14).

Published in: on 28 septiembre, 2011 at 22:35  Deja un comentario  

LECTURAS DEL MIÉRCOLES XXVI DEL T. ORDINARIO 28 DE SEPTIEMBRE


"El que empuña el arado y mira hacia atrás, no sirve para el Reino de Dios".



SAN LORENZO RUÍZ Y COMPAÑEROS MÁRTIRES

ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 30, 3-4)


Sírveme de defensa, Dios mío, de roca y fortaleza salvadoras; y pues eres mi baluarte y mi refugio, acompáñame y guíame.


ORACIÓN COLECTA


Señor nuestro, que prometiste venir y hacer tu morada en los corazones rectos y sinceros, concédenos la rectitud y sinceridad de vida que nos hagan dignos de esa presencia tuya. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Si le parece bien a mi señor, el rey, déjeme ir para reconstruir la ciudad de mis padres.



Del libro de Nehemías: 2, 1-8

 


En el primer mes del año veinte del reinado de Artajerjes, siendo yo, Nehemías, el copero mayor, serví una copa de vino y se la ofrecí al rey. Nunca me había presentado ante él con cara triste. Entonces el rey me preguntó: "¿Por qué estás tan triste, si no estás enfermo? ¿Qué es lo que te preocupa?".


Sentí entonces un gran temor y le respondí: "Que viva el rey para siempre. ¿Cómo no he de estar triste, cuando la ciudad donde se hallan enterrados mis padres está en ruinas y sus puertas consumidas por el fuego?". El rey me dijo: "¿Qué es, pues, lo que quieres?".

 

Me encomendé al Dios del cielo y le contesté al rey: "Si le parece bien a mi señor, el rey, y si está satisfecho de mí, déjeme ir a Judá para reconstruir la ciudad donde están enterrados mis padres”. El rey y la reina, que estaba sentada a su lado, me preguntaron: "¿Cuánto durará tu viaje y cuándo volverás?". Al rey le pareció bien el plazo que le indiqué y me permitió ir.

 

Entonces yo añadí: "Ruego a mi señor, el rey, que me dé cartas para los gobernadores de la región del otro lado del río, para que me faciliten el viaje hasta Judá; y una carta dirigida a Asaf, encargado de los bosques reales, para que me suministren madera para las puertas de la ciudadela del templo, para el muro de la ciudad y para la casa donde me voy a instalar".

 

Gracias a Dios, el rey me concedió todo lo que le pedí.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.

 


Del salmo 136


R/. Tu recuerdo, Señor, es mi alegría.


Junto a los ríos de Babilonia nos sentábamos a llorar de nostalgia; de los sauces que estaban en la orilla colgamos nuestras arpas. R/.

 

Aquellos que cautivos nos tenían pidieron que cantáramos. Decían los opresores: "Algún cantar de Sión, alegres, cántennos". R/.

 

Pero, ¿cómo podríamos cantar un himno al Señor en tierra extraña? Que la mano derecha se me seque si de ti, Jerusalén, yo me olvidara! R/.

 

¡Que se me pegue al paladar la lengua, Jerusalén, si no te recordara, o si, fuera de ti, alguna otra alegría yo buscara! R/.

 


ACLAMACIÓN (cfr. Flp 3, 8-9)




R/. Aleluya, aleluya.


 

 

Todo lo considero una pérdida y lo tengo por basura, para ganar a Cristo y vivir unido a El. R/.







Te seguiré a dondequiera que vayas.



Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 57-62

 


En aquel tiempo, mientras iban de camino Jesús y sus discípulos, alguien le dijo: "Te seguiré a dondequiera que vayas". Jesús le respondió "Las zorras tienen madrigueras y los pájaros, nidos; pero el Hijo del hombre no tiene en dónde reclinar la cabeza".

A otro, Jesús le dijo: "Sígueme". Pero él le respondió: "Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre". Jesús le replicó: "Deja que los muertos entierren a sus muertos. Tú ve y anuncia el Reino de Dios".Otro le dijo: "Te seguiré, Señor; pero déjame primero despedirme de mi familia". Jesús le contestó: "El que empuña el arado y mira hacia atrás, no sirve para el Reino de Dios".

 Palabra del Señor.

 Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Que este sacrificio, Señor, que vamos a ofrecerte, nos purifique, nos renueve y nos ayude a obtener la recompensa eterna, prometida a quienes cumplen tu voluntad. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 77, 29-30)


El Señor colmó el deseo de su pueblo: comieron y quedaron satisfechos.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Señor, aviva cada vez más en nosotros el deseo de recibir este pan eucarístico, por medio del cual nos comunicas tú la vida verdadera. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 27 septiembre, 2011 at 18:53  Deja un comentario  

LECTURAS DEL MARTES XXVI DEL T. ORDINARIO 27 DE SEPTIEMBRE SAN VICENTE DE PAUL


Jesús envió mensajeros por delante.



 



SAN VICENTE DE PAUL


ANTÍFONA DE ENTRADA (Lc 4, 18)


El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para llevar la Buena Nueva a los pobres y anunciar su liberación a los cautivos.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, que otorgaste a san Vicente de Paúl una inmensa compasión por los pobres y una gran preocupación por formar sacerdotes que se dedicaran a los más necesitados, concédenos, por su intercesión,


LITURGIA DE LA PALABRA


Vendrán numerosos pueblos a buscar al Señor en Jerusalén.


Del libro del profeta Zacarías: 8, 20-23

 


Esto dice el Señor de los ejércitos: "Vendrán pueblos y habitantes de muchas ciudades. Y los habitantes de una ciudad irán a ver a los de la otra y les dirán: `Vayamos a orar ante el Señor y a implorar la ayuda del Señor de los ejércitos’. ‘Yo también voy’. Y vendrán numerosos pueblos y naciones poderosas a orar ante el Señor Dios en Jerusalén y a implorar su protección".


Esto dice el Señor de los ejércitos: "En aquellos días, diez hombres de cada lengua extranjera tomarán por el borde del manto a un judío y le dirán: ‘Queremos ir contigo, pues hemos oído decir que Dios está con ustedes’".

 

 Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

 



Del salmo 86


R/. Dios está con nosotros.


Jerusalén gloriosa, el Señor ha puesto en ti su templo. Tú eres más querida para Dios que todos los santuarios de Israel. R/.

 

De ti, Jerusalén, ciudad del Señor, se dirán maravillas. Egipto y Babilonia adorarán al Señor; los filisteos, con Tiro y Etiopía, serán como tus hijos. R/.

 

Y de ti, Jerusalén, afirmarán: "Todos los pueblos han nacido en ti y el Altísimo es tu fortaleza". R/.

 

El Señor registrará en el libro de la vida a cada pueblo, convertido en ciudadano tuyo; y todos los pueblos te cantarán, bailando: "Tú eres la fuente de nuestra salvación". R/.

 


ACLAMACIÓN (Mc 10, 45)



 


R/. Aleluya, aleluya.


 

 

 

El Hijo del hombre vino a servir y a dar su vida por la redención de todos. R/.




Jesús tomó la firme determinación de ir a Jerusalén.



Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 51-56


Cuando ya se acercaba el tiempo en que tenía que salir de este mundo, Jesús tomó la firme determinación de emprender el viaje a Jerusalén. Envió mensajeros por delante y ellos fueron a una aldea de Samaria para conseguirle alojamiento; pero los samaritanos no quisieron recibirlo, porque supieron que iba a Jerusalén. Ante esta negativa, sus discípulos Santiago y Juan le dijeron: "Señor, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo para que acabe con ellos?". Pero Jesús se volvió hacia ellos y los reprendió. Después se fueron a otra aldea.


 Palabra del Señor.


 Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Dios nuestro, que concediste a san Vicente de Paúl imitar con su vida el misterio de redención y de amor que celebraba en la Eucaristía, haz que este mismo sacrificio nos asemeje cada vez más a tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 106, 8-9)


Demos gracias al Señor por su misericordia y los prodigios hechos en favor de su pueblo, porque sació a los que tenían sed y dio de comer a los hambrientos.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que esta sagrada comunión nos ayude, Señor, a imitar a tu Hijo Jesucristo y a llevar a los pobres, a ejemplo de san Vicente de Paúl, el anuncio y la prueba de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 26 septiembre, 2011 at 19:51  Deja un comentario  

LECTURAS DEL LUNES XXVI DEL T. ORDINARIO 26 DE SEPTIEMBRE


El que no está contra ustedes, está en favor de ustedes




SAN COSME Y SAN DAMIAN



ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Si 36, 18-19)


Señor, concede la paz a los que en ti esperan; escucha las oraciones de tus hijos y guíanos por el camino de la justicia.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, que cuidas de todos los hombres con amor paternal y diste a todos un origen idéntico, concédenos formar una sola familia en la que reine siempre el amor y la paz. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Yo salvaré a mi pueblo de los países de oriente y occidente.



Del libro del profeta Zacarías: 8, 1-8

 


En aquellos días, me fue dirigida a mí, Zacarías, la palabra del Señor en estos términos: "Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Yo siento por Sión un amor ardiente y celoso, un amor celoso que me arrebata’.


Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Regresaré a Sión y en medio de Jerusalén habitaré. Jerusalén se llamará ciudad fiel, y el monte del Señor de los ejércitos, monte santo’. Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘De nuevo se sentarán los ancianos y las ancianas en las plazas de Jerusalén, cada cual con su bastón en la mano, por su avanzada edad; las plazas de la ciudad se llenarán de niños y niñas que jugarán en ellas’. Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Aunque esto les parezca imposible a los sobrevivientes de este pueblo, ¿acaso va a ser imposible para mí?’. Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Yo salvaré a mi pueblo de los países de oriente y occidente, y lo traeré aquí para que habite en Jerusalén. Él será mi pueblo y yo seré su Dios, lleno de fidelidad y de justicia’ ".

 

 Palabra de Dios.


 Te alabamos, Señor.

 



Del salmo 101


R/. Tu pueblo nuevo te alabará, Señor.


Cuando el Señor reedifique a Sión y aparezca glorioso, cuando oiga el clamor del oprimido y no se muestre a sus plegarias sordo, entonces temerán al Señor todos los pueblos, y su gloria verán los poderosos. R/.

 

Esto se escribirá para el futuro y alabará al Señor el pueblo nuevo, porque el Señor, desde su altura santa, ha mirado a la tierra desde el cielo, para oír los gemidos del cautivo y librar de la muerte al prisionero. R/.

 

Bajo tu protección, Señor, habitaran los hijos de tus siervos y se establecerán sus descendientes. Tu nombre en Sión alabarán por eso, cuando en Jerusalén, a darte culto, se reúnan, Señor, todos los pueblos. R/.

 



ACLAMACIÓN (Mc 10, 45)

R/. Aleluya, aleluya.

 

 

 

 

El Hijo del hombre vino a servir y a dar su vida por la redención de todos. R/.

 

 

 

 

El más pequeño entre todos ustedes, ése es el más grande.

 


Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 46-50

 


Un día, surgió entre los discípulos una discusión sobre quién era el más grande de ellos. Dándose cuenta Jesús de lo que estaban discutiendo, tomó a un niño, lo puso junto a sí y les dijo: "El que reciba a este niño en mi nombre, me recibe a mí; y el que me recibe a mí, recibe también al que me ha enviado. En realidad el más pequeño entre todos ustedes, ése es el más grande".


Entonces, Juan le dijo: "Maestro, vimos a uno que estaba expulsando a los demonios en tu nombre; pero se lo prohibimos, porque no anda con nosotros". Pero Jesús respondió: "No se lo prohíban, pues el que no está contra ustedes, está en favor de ustedes".

 

 Palabra del Señor.


 Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Te ofrecemos, Señor, bajo los signos sacramentales del pan y del vino, el sacrificio de tu Hijo, rey de la paz, para que este misterio de unidad y de amor, reafirme la fraternidad entre todos tus hijos. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Mt 5, 9)


Bienaventurados los que procuran la paz, porque serán llamados hijos de Dios.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Concédenos, Señor, el espíritu de tu amor, a fin de que, alimentados con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, fomentemos entre todos los hombres la paz que Él mismo nos dejó. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 25 septiembre, 2011 at 23:02  Deja un comentario  

LECTURAS DEL DOMINGO XXVI DEL T. ORDINARIO 25 DE SEPTIEMBRE


Tengan los mismos Sentimientos que tuvo Cristo Jesús.


 



SAN CLEOFAS


ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Dn 3, 31. 29. 30. 43. 42)


Podrías hacer recaer sobre nosotros, Señor, todo el rigor de tu justicia, porque hemos pecado contra ti y hemos desobedecido tus mandatos; pero haz honor a tu nombre y trátanos conforme a tu inmensa misericordia.


ORACIÓN COLECTA


Dios nuestro, que con tu perdón y tu misericordia, nos das la prueba más delicada de tu omnipotencia, apiádate de nosotros, pecadores, para que no desfallezcamos en la lucha por obtener el cielo que nos has prometido. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Cuando el pecador se arrepiente, salva su vida.



Del libro del profeta Ezequiel: 18, 25-28


Esto dice el Señor: "Si ustedes dicen: ‘No es justo el proceder del Señor’, escucha, casa de Israel: ¿Conque es injusto mi proceder? ¿No es más bien el proceder de ustedes el injusto? Cuando el justo se aparta de su justicia, comete la maldad y muere; muere por la maldad que cometió. Cuando el pecador se arrepiente del mal que hizo y practica la rectitud y la justicia, él mismo salva su vida. Si recapacita y se aparta de los delitos cometidos, ciertamente vivirá y no morirá".


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.

 



Del salmo 24



R/. Descúbrenos, Señor, tus caminos.


Descúbrenos, Señor, tus caminos, guíanos con la verdad de tu doctrina; tú eres nuestro Dios y salvador y tenemos en ti nuestra esperanza. R/.

 

Acuérdate, Señor, que son eternos tu amor y tu ternura. Según ese amor y esa ternura, acuérdate de nosotros. R/.

 

Porque el Señor es recto y bondadoso indica a los pecadores el sendero, guía por la senda recta a los humildes y descubre a los pobres sus caminos. R/.



Tengan los mismos Sentimientos que tuvo Cristo Jesús.




De la carta del apóstol san Pablo a los filipenses: 2, 1-11

 



Hermanos: Si alguna fuerza tiene una advertencia en nombre de Cristo, si de algo sirve una exhortación nacida del amor, si nos une el mismo Espíritu y si ustedes me profesan un afecto entrañable, llénenme de alegría teniendo todos una misma manera de pensar, un mismo amor, unas mismas aspiraciones y una sola alma. Nada hagan por espíritu de rivalidad ni presunción; antes bien, por humildad, cada uno considere a los demás como superiores a sí mismo y no busque su propio interés, sino el del prójimo. Tengan los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús.


Cristo, siendo Dios no consideró que debía aferrarse a las prerrogativas de su condición divina, sino que, por el contrario, se anonadó a sí mismo, tomando la condición de siervo, y se hizo semejante a los hombres. Así, hecho uno de ellos, se humilló a sí mismo y por obediencia aceptó incluso la muerte, y una muerte de cruz.

 

Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que, al nombre de Jesús, todos doblen la rodilla en el cielo, en la tierra y en los abismos, y todos reconozcan públicamente que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

 

 Palabra de Dios.


 Te alabamos, Señor.




 

ACLAMACIÓN (Jn 10, 27)


R/. Aleluya, aleluya.


 

 

 

 

Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor; yo las conozco y ellas me siguen. R/.



El segundo hijo se arrepintió y fue. Los publícanos y las prostitutas se les han adelantado en el Reino de Dios.



Del santo vangelio según san Mateo: 21, 28-32

 



En aquel tiempo, Jesús dijo a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: "¿Qué opinan de esto? Un hombre que tenía dos hijos fue a ver al primero y le ordenó: ‘Hijo, ve a trabajar hoy en la viña’. Él le contestó: `Ya voy, señor’, pero no fue. El padre se dirigió al segundo y le dijo lo mismo. Éste le respondió: ‘No quiero ir’, pero se arrepintió y fue. ¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre?". Ellos le respondieron: "El segundo".


Entonces Jesús les dijo: "Yo les aseguro que los publícanos y las prostitutas se les han adelantado en el camino del Reino de Dios. Porque vino a ustedes Juan, predicó el camino de la justicia y no le creyeron; en cambio, los publícanos y las prostitutas, sí le creyeron; ustedes, ni siquiera después de haber visto, se han arrepentido ni han creído en él".

 

 Palabra del Señor.


 Gloria a ti, Señor Jesús.


Credo


PLEGARIA UNIVERSAL

 


Después de haber proclamado nuestra fe, presentemos nuestra oración confiada. Después de cada petición diremos: Escúchanos, Padre.


Por toda la Iglesia en México, que sea un vínculo de unidad y de paz. Oremos.

 

Por el Papa, por nuestro obispo y por todos los obispos del mundo. Oremos.

 

Por las vocaciones al sacerdocio, al diaconado, a la vida religiosa y por todos aquellos que quieren seguir a Jesucristo con fidelidad. Oremos.

 

Por los hombres y mujeres del mundo entero, principalmente por aquellos que sufren las consecuencias de una riqueza mal repartida. Oremos.

 

Por todos los que han tenido que dejar su casa para ganarse el pan en tierras lejanas y desconocidas. Oremos.

 

Por todos los que, movidos por el amor, trabajan por el bien de sus hermanos. Oremos.

 

Por los ancianos, los enfermos y los que se encuentran solos. Oremos.

 

Por los que ahora estamos reunidos para esta Eucaristía, compartiendo la alegría de la fe. Oremos



Escucha, Padre, nuestra oración. Concédenos ser cada vez más fieles a tu amor, siguiendo el camino de tu Hijo Jesucristo. Que vive y reina por los siglos de los siglos.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS


Acepta, Padre misericordioso, nuestros dones y conviértelos en el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, fuente de toda bendición para tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio para los domingos del Tiempo Ordinario.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (1 Jn 3, 16)


Hemos conocido lo que es el amor de Dios, en que dio su vida por nosotros. Por eso también nosotros debemos dar la vida por nuestros hermanos.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN


Que esta Eucaristía renueve, Señor, nuestro cuerpo y nuestro espíritu a fin de que podamos participar de la herencia gloriosa de tu Hijo, cuya muerte hemos anunciado y compartido. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 25 septiembre, 2011 at 5:02  Deja un comentario  

LECTURAS DEL SÁBADO XXV DEL T. ORDINARIO 24 DE SEPTIEMBRE NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED

Vísperas I del domingo: 2a semana del Salterio. Tomo IV: p. 806. Para los fieles: p. 555. Edición popular: pp. 108 y 481. Feria (Verde/Blanco)

MISA DE SANTA MARÍA EN SÁBADO



NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED



REFLEXIÓN: Estamos ante la segunda predicción que de su pasión y muerte hace Cristo en el evangelio de San Lucas. Jesús se aplica el sugestivo título mesiánico de «Hijo del hombre» (Dan 7, 13), que Él relaciona con la figura del Siervo doliente del Señor, según los poemas del profeta Isaías (Cfr Is 42, 1-4)… Precisamente cuando«todos comentaban, admirados, los prodigios que Jesús hacía», es cuando Él aprovecha para llevar a sus temerosos y cerrados discípulos a poner los pies en la tierra, preparándolos a superar el gran “escándalo de la cruz”que –en cumplimiento a los misteriosos designios del Padre–, tendrá que afrontar Él al final de sus días.


ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Jdt 13, 18-19)


María, el Altísimo te ha bendecido más que a todas las mujeres de la tierra, y de tal manera te ha glorificado, que los hombres no cesan de alabarte.


ORACIÓN COLECTA

Dios de eterna gloria, Padre santo, que has introducido en el mundo la verdadera alegría, Cristo, tu Hijo, sol de justicia nacido de la Virgen Madre, líbranos del peso del pecado, que entristece y extingue tu Espíritu en nosotros, y recíbenos en la mesa de tu Reino, para saciarnos con el pan que contiene en sí todo deleite. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.


LITURGIA DE LA PALABRA


Vengo a vivir en medio de ti, Jerusalén.



Del libro del profeta Zacarías: 2, 5-9. 14-15

En aquellos días, levanté los ojos y vi a un hombre con una cuerda de medir en la mano. Le pregunté: "¿A dónde vas?". Él me respondió: "Voy a medir la ciudad de Jerusalén, para ver cuánto tiene de ancho y de largo".

Entonces el ángel que hablaba conmigo se alejó de mí y otro ángel le salió al encuentro y le dijo: "Corre, háblale a ese joven y dile: ‘Jerusalén ya no tendrá murallas, debido a la multitud de hombres y ganados que habrá en ella. Yo mismo la rodearé, dice el Señor, como un muro de fuego y mi gloria estará en medio de ella’ ".

Canta de gozo y regocíjate, Jerusalén, pues vengo a vivir en medio de ti, dice el Señor. Muchas naciones se unirán al Señor en aquel día; ellas también serán mi pueblo y yo habitaré en medio de ti.

Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Jeremías 31



R/. El Señor será nuestro pastor.

Escuchen, pueblos, la palabra del Señor, anúncienla aun en las islas más remotas: "El que dispersó a Israel lo reunirá y lo cuidará como el pastor a su rebaño". R/.

Porque el Señor redimió a Jacob y lo rescató de las manos del poderoso. Ellos vendrán para aclamarlo al monte Sión y vendrán a gozar de los bienes del Señor. R/.

Entonces se alegrarán las jóvenes, danzando; se sentirán felices jóvenes y viejos, porque yo convertiré su tristeza en alegría, los llenaré de gozo y aliviaré sus penas. R/.


ACLAMACIÓN (cfr. 2 Tm 1, 10)





R/. Aleluya, aleluya.

Jesucristo, nuestro Salvador, ha vencido la muerte y ha hecho resplandecer la vida por medio del Evangelio. R/.


El Hijo del hombre va a ser entregado. – Tenían miedo de preguntarle acerca de este asunto.


Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 43-45

En aquel tiempo, como todos comentaban, admirados, los prodigios que Jesús hacía, éste dijo a sus discípulos: "Presten mucha atención a lo que les voy a decir: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres".

Pero ellos no entendieron estas palabras, pues un velo les ocultaba su sentido y se las volvía incomprensibles. Y tenían miedo de preguntarle acerca de este asunto.


Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Jubilosos de poder celebrar la festividad de la Madre de tu Hijo, te presentamos, Señor, estas ofrendas de alabanza, y te pedimos que por este santo intercambio de dones, se acrecienten en nosotros los frutos de la redención eterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio de Santa Marta Virgen.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Lc 1, 48)

Me llamarán bienaventurada todas las generaciones, porque ha puesto Dios sus ojos en la humildad de su esclava.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Habiendo recibido el sacramento celestial, te pedimos, Señor, que cuantos hemos celebrado con veneración, la memoria de la santísima Virgen María, merezcamos participar del banquete eterno. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 23 septiembre, 2011 at 22:07  Deja un comentario  

LECTURAS DEL VIERNES XXV DEL T. ORDINARIO 23 DE SEPTIEMBRE SAN PÍO DE PIETRELCINA

"¿Quién dice la gente que

soy yo?"



SAN PÍO DE PIETRELCINA


ANTÍFONA DE ENTRADA (cfr. Sal 23, 5-6)


San Pío ha recibido la bendición del Señor, ha encontrado gracia delante de Dios, su salvador, porque buscó sinceramente al Señor.


ORACIÓN COLECTA

Dios todopoderoso y eterno, que diste a san Pío, presbítero, la gracia de participar singularmente de la cruz de tu Hijo y, por su ministerio, renovaste los prodigios de tu misericordia, concédenos por su intercesión que, asociados continuamente a los sufrimientos de Cristo, lleguemos felizmente a la gloria de la resurrección. Por el mismo Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor, que vive y reina contigo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Dentro de poco tiempo llenaré de gloria este templo.



Del libro del profeta Ageo: 1, 15-2, 9

El día veintiuno del séptimo mes del año segundo del reinado de Darío, la palabra del Señor vino, por medio del profeta Ageo, y dijo: "Diles a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote, y al resto del pueblo: `¿Queda alguien entre ustedes que haya visto este templo en el esplendor que antes tenía? ¿Y qué es lo que ven ahora? ¿Acaso no es muy poca cosa a sus ojos?

Pues bien, ¡ánimo!, Zorobabel; ¡ánimo!, Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote; ¡ánimo!, pueblo entero. ¡Manos a la obra!, porque yo estoy con ustedes dice el Señor de los ejércitos Conforme a la alianza que hice con ustedes, cuando salieron de Egipto, mi espíritu estará con ustedes No teman’.

Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Dentro de poco tiempo conmoveré el cielo y la tierra, el mar y los continentes. Conmoveré a todos los pueblos para que vengan a traerme las riquezas de todas las naciones y llenaré de gloria este templo. Mía es la plata y mío es el oro. La gloria de este segundo templo será mayor que la del primero, y en este sitio daré yo la paz’, dice el Señor de los ejércitos".

Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Del salmo 42



R/. Envíame, Señor, tu luz y tu verdad.

Defiéndeme, Señor, hazme justicia contra un pueblo malvado; del hombre tramposo y traicionero ponme a salvo. R/.

Si tú eres de verdad mi Dios-refugio, ¿por qué me has rechazado? ¿Por qué tengo que andar tan afligido, viendo cómo me oprime el adversario? R/.

Envíame, Señor, tu luz y tu verdad; que ellas se conviertan en mi guía y hasta tu monte santo me conduzcan, allí donde tú habitas. R/.

Al altar del Señor me acercaré, al Dios que es mi alegría, y a mi Dios, el Señor, le daré gracias al compás de la citara. R/.


ACLAMACIÓN (Mc 10, 45)


R/. Aleluya, aleluya.

El Hijo del hombre vino a servir y a dar su vida por la redención de todos. R/.





Tú eres el Mesías de Dios. – Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho.




Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 18-22

Un día en que Jesús, acompañado de sus discípulos, había ido a un lugar solitario para orar, les preguntó: "¿Quién dice la gente que soy yo?". Ellos contestaron: "Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; y otros, que alguno de los antiguos profetas, que ha resucitado".

El les dijo: "Y ustedes, ¿quién dicen que soy yo?".

Respondió Pedro: "El Mesías de Dios". El les ordenó severamente que no lo dijeran a nadie.Después les dijo: "Es necesario que el Hijo del hombre sufra mucho, que sea rechazado por los ancianos, los sumos sacerdotes y los escribas, que sea entregado a la muerte y que resucite al tercer día".

Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.



ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Mira, Señor, con bondad, los dones que tu pueblo te presenta para celebrar la memoria de san Pío, y concédenos que, libres de las ambiciones y egoísmos de este mundo, te busquemos a ti, como nuestro único bien verdadero. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Sal 33, 9)

Hagan la prueba y verán qué bueno es el Señor. Dichoso el hombre que se acoge a Él.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor, con la luz y la fuerza de este sacramento que hemos recibido, condúcenos siempre por el camino de tu amor, a fin de que la obra de salvación que has iniciado en nosotros, se vea coronada el día de la venida gloriosa de tu Hijo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

Published in: on 22 septiembre, 2011 at 22:05  Deja un comentario  

LECTURAS DEL JUEVES XXV DEL T. ORDINARIO 22 DE SEPTIEMBRE

El rey Herodes se enteró de

todos los prodigios que

Jesús hacia y no sabía a

qué atenerse.


SAN MAURICIO MÁRTIR


ANTÍFONA DE ENTRADA (Sal 77, 23-25)


Abrió Dios las compuertas del cielo e hizo llover sobre ellos el maná para que comiesen; les dio un trigo celeste, y el hombre comió pan de ángeles.


ORACIÓN COLECTA

Dios nuestro, que llevaste a cabo la obra de la redención humana por el misterio pascual de tu Hijo, concédenos que, al anunciar llenos de fe por medio de los signos sacramentales, su muerte y resurrección, recibamos cada vez con mayor abundancia los frutos de la salvación. Por nuestro Señor Jesucristo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Construyan el templo para que pueda yo estar satisfecho.


Del libro del profeta Ageo: 1, 1-8

El día primero del mes sexto del año segundo del rey Darío, la palabra del Señor se dirigió, por medio del profeta Ageo, a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judea, y a Josué, hijo de Yosadac, sumo sacerdote, y les dijo: "Esto dice el Señor de los ejércitos: ‘Este pueblo mío anda diciendo que todavía no ha llegado el momento de reconstruir el templo’ ".

La palabra del Señor llegó por medio del profeta Ageo y dijo: "¿De modo que es tiempo de vivir en casas con paredes revestidas de cedro mientras que mi casa está en ruinas? Pues ahora, dice el Señor de los ejércitos, reflexionen sobre su situación: han sembrado mucho, pero cosechado poco; han comido, pero siguen con hambre; han bebido, pero siguen con sed; se han vestido, pero siguen con frío, y los que trabajaron a sueldo echaron su salario en una bolsa rota". Esto dice el Señor de los ejércitos: "Reflexionen, pues, sobre su situación. Suban al monte, traigan madera y construyan el templo, para que pueda yo estar satisfecho y mostrar en él mi gloria, dice el Señor".

Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.



Del salmo 149

R/. El Señor es amigo de su pueblo.

Entonen al Señor un canto nuevo, en la reunión litúrgica proclámenlo. En su creador y rey, en el Señor, alégrese Israel, su pueblo santo. R/.

En honor de su nombre, que haya danzas, alábenlo con arpa y tamboriles. El Señor es amigo de su pueblo y otorga la victoria a los humildes. R/.

Que se alegren los fieles en el triunfo, que inunde el regocijo sus hogares, que alaben al Señor con sus palabras, pues en esto su pueblo se complace. R/.


ACLAMACIÓN (Jn 14, 6)

R/. Aleluya, aleluya.

Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie va al Padre si no es por mí, dice el Señor. R/.


A Juan yo lo mandé decapitar: ¿Quién es entonces éste de quien oigo semejantes cosas?


Del santo Evangelio según san Lucas: 9, 7-9

En aquel tiempo, el rey Herodes se enteró de todos los prodigios que Jesús hacia y no sabía a qué atenerse, porque unos decían que Juan había resucitado; otros, que había regresado Elías, y otros, que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.

Pero Herodes decía: "A Juan yo lo mandé decapitar. ¿Quién será, pues, éste del que oigo semejantes cosas?". Y tenía curiosidad de ver a Jesús.

Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Señor, al celebrar el memorial de nuestra salvación, te pedimos humildemente nos concedas que este sacramento de amor sea siempre para nosotros un signo de unidad y un vinculo de amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (Jn 6, 51-52)

Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo dice el Señor. El que coma de este pan, vivirá eternamente; pues el pan que voy a dar, es mi carne, y lo doy para vida del mundo.


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor, que la participación en este banquete celestial nos santifique, de modo que, por la recepción del Cuerpo y Sangre de Cristo, se estreche entre nosotros la unión fraterna. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 21 septiembre, 2011 at 23:37  Deja un comentario  

LECTURAS DEL MIÉRCOLES XXV DEL T. ORDINARIO 21 DE SEPTIEMBRE SAN MATEO APÓSTOL

Yo no he venido a llamar a

los justos, sino a los

pecadores.




SAN MATEO APÓSTOL



ANTIFONA DE ENTRADA (Mt 29, 19-20)


Vayan y prediquen a todos los hombres, bautizándolos y enseñándoles a cumplir todo lo que yo les he mandado, dice el Señor.


Se dice Gloria.


ORACIÓN COLECTA

Dios misericordioso, que elegiste a san Mateo, un recaudador de impuestos, para hacerlo apóstol tuyo, ayúdanos, por su intercesión, a cumplir nuestras responsabilidades en esta vida como verdaderos apóstoles de Cristo, que vive y reina contigo…


LITURGIA DE LA PALABRA


Él fue quien concedió a unos ser apóstoles y a otros, evangelizadores.


De la carta del apóstol san Pablo a los efesios: 4, 1-7. 11-13

Hermanos: Yo, Pablo, prisionero por la causa del Señor, los exhorto a que lleven una vida digna del llamamiento que han recibido. Sean siempre humildes y amables; sean comprensivos y sopórtense mutuamente con amor; esfuércense en mantenerse unidos en el espíritu con el vínculo de la paz.

Porque no hay más que un solo cuerpo y un solo Espíritu, como es también sólo una la esperanza del llamamiento que ustedes han recibido. Un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un solo Dios y Padre de todos, que reina sobre todos, actúa a través de todos y vive en todos.

Cada uno de nosotros ha recibido la gracia en la medida en que Cristo se la ha dado. El fue quien concedió a unos ser apóstoles; a otros, ser profetas; a otros, ser evangelizadores; a otros, ser pastores y maestros Y esto, para capacitar a los fieles, a fin de que, desempeñando debidamente su tarea, construyan el cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a estar unidos en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios y lleguemos a ser hombres perfectos, que alcancemos en todas sus dimensiones la plenitud de Cristo.


Palabra de Dios.


Te alabamos, Señor.


Del salmo 18



R/. El mensaje del Señor resuena en toda la tierra.

Los cielos proclaman la gloria de Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos. Un día comunica su mensaje al otro día y una noche se lo trasmite a la otra noche. R/.

Sin que pronuncien una palabra, sin que resuene su voz, a toda la tierra llega su sonido, y su mensaje hasta el fin del mundo. R/.


ACLAMACIÓN




R/. Aleluya, aleluya.

Señor, Dios eterno, alegres te cantamos, a ti nuestra alabanza. A ti, Señor, te alaba el coro celestial de los apóstoles. R/.








Sígueme. Él se levantó y lo siguió.



Del santo Evangelio según san Mateo: 9, 9-13

En aquel tiempo, Jesús vio a un hombre llamado Mateo, sentado a su mesa de recaudador de impuestos, y le dijo: "Sígueme". Él se levantó y lo siguió.

Después, cuando estaba a la mesa en casa de Mateo, muchos publícanos y pecadores se sentaron también a comer con Jesús y sus discípulos Viendo esto, los fariseos preguntaron a los discípulos: "¿Por qué su Maestro come con publícanos y pecadores?". Jesús los oyó y les dijo: "No son los sanos los que necesitan de médico, sino los enfermos. Vayan, pues, y aprendan lo que significa: Yo quiero misericordia y no sacrificios. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores".

Palabra del Señor.


Gloria a ti, Señor Jesús.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Acepta, Señor, los dones que te presentamos en la fiesta del apóstol y evangelista san Mateo y, como fruto de esta Eucaristía, concede a tu Iglesia mantenerse fiel al Evangelio predicado por los apóstoles. Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio I o II de los Apóstoles.


ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN (cfr. Mt 9, 10-13)

No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores, dijo el Señor a quienes murmuraban de que estuviera comiendo en casa de Mateo con publícanos y pecadores


ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Tú, que nos has hecho partícipes en esta Eucaristía del júbilo de san Mateo al recibir en su casa a Jesucristo, concédenos, Señor, la gracia de no separarnos nunca de tu Hijo y de esforzarnos por darlo a conocer. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Published in: on 20 septiembre, 2011 at 23:36  Deja un comentario